En la mayor parte de las ocasiones las emociones nos las generamos nosotros mismos cada día dependiendo muchas veces de la forma que tenemos de pensar.

Por nuestra educación, por costumbre, hábitos, porque es lo que todos hacemos, …el caso es que sin darnos cuenta nuestra mente tiene tendencia a pensar en negativo, utilizando el “no” en estos pensamientos, no sé si seré capaz, palabras o frases cortas que llevan implícita una imposibilidad, como muchas de las ocasiones en que utilizamos la palabra intentar, haré lo posible, …

Incluso personas que se consideran optimistas y positivas, si se observan a sí mismas se dan cuenta de que utilizan muchas veces este tipo de palabras o frases.

Al hacerlo, como nuestra mente funciona entendiendo todo “literalmente”, hará que nuestro cuerpo se coloque en modo “negativo”, aunque no sea nuestra intención, emitiendo un mensaje no verbal igualmente negativo, que en muchas ocasiones no coincide con lo que queremos transmitir.

Como sabemos, el mensaje no verbal es mucho más poderoso que el verbal, así las cosas, aún sin quererlo nuestra comunicación tiene tendencia a ser bastante negativa.

Con esto quiero hacer una llamada de atención para que tomemos conciencia de la influencia enorme que tiene nuestra forma de pensar en toda nuestra vida.

La buena noticia es que, si somos conscientes de ello, podemos reaprender a pensar de otra manera más positiva y al hacerlo veremos cómo nuestro lenguaje cambia y también nuestro comportamiento, transmitiendo a los demás mensajes mucho más positivos y lo que considero es más importante, sintiéndonos mucho mejor con nosotros mismos.

¡Toma consciencia de cómo piensas y podrás cambiar tus pensamientos para que sean más positivos!


Rafael Santandreu

Gestionar las emociones y los impulsos puede ser complicado, y para lograrlo es conveniente tener control mental. Es una recomendación del psicólogo Rafael Santandreu que, además, también afirma que los pensamientos son los causantes de todos nuestros males, y que quien controla su mente, controla su felicidad.