Muchas veces cuando sentimos que algo no va del todo bien en nuestras vidas, cuando notamos que necesitamos un “cambio”, pensamos en modificar algo “grande”, cambiar de casa, de trabajo, de amigos…de pareja…y además nos  centramos casi siempre en cambiar algo de fuera que, por liado que sea, parece ser más sencillo que echar una miradita hacia dentro a ver que está pasando ahí.

¡¡¡Pues tengo una buena noticia!!!

No siempre se necesitan grandes cambios externos, no al menos como respuesta a ese sentimiento que LOGO 2mencionaba al inicio.

Las mayoría de las grandes transformaciones que podemos experimentar como personas, son debidas a la suma de varios o muchos pequeños cambios que tienen que ver con el ser y que vamos introduciendo en nuestras vidas poco a poco, de forma casi imperceptible, hasta que de pronto empiezas a sentirte mejor.

Te animo a que decidas si quieres sentirte feliz con la vida que tienes y  a que tomes conciencia de la necesidad de echar una mirada hacia dentro para averiguar qué pequeños cambios  necesitas…..después ya tendrás tiempo de decidir de forma más objetiva si has de cambiar de casa, de coche o de trabajo.

Un abrazo

Elvira     ge2

25 de Julio 2016